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CRONICA SOCIAL.-LA MUERTE NO TIENE DIGNIDAD.
Que alguien diga dónde está la dignidad donde solo hay dolor............., ¡eh infinita tristeza ¡…….
En días atrás un gran hombre valiente y sincero reconocía públicamente “que había ayudado a suicidarse a su mujer, que estaba muy agotada, que el momento es "muy doloroso por dos razones, en primer lugar porque supone una pérdida", y en segundo lugar, porque lo tenía que hacer él, ha estado sufriendo "mucho tiempo", ha sido "una mujer muy valiente", por lo que espera que "esto sirva para algo”.
Uno de tantos casos donde la muerte queda en entredicho, hace unos días nos enteramos que “una mujer con Alzheimer muere”, pero no busquen la noticia, porque no existe, la muerte la acatamos sin rechistar, extrañamente irrumpe sigilosamente al final de la vida sin el derecho a pedir el libro de reclamación, sabemos tan poco de ella que es la gran desconocida, nos dirán “medronco”, se sabe tampoco que miedo nos da el no vivir.
Otro caso a mencionar el de esta mujer que le diagnosticaron alzhéimer hace unos 12 años, desde ese mismo momento pidió a la familia “por favor, no esperéis a que me olvide de vosotros, a que no os reconozca como hijos o que no reconozca a papa, ese día me tenéis que ayudar a marchar”, les pidió.
Se incumplió su última voluntad como las de tantos otros, el derecho a la vida antes de nacer es muy opinable y a nadie se le obliga sistemáticamente la decisión, pero no al derecho a elegir un día fatídico a morir, este es un tema tabú políticamente, cuando el populismo y el buenismo dejen paso al sentido común, la muerte se dignificara cuando las personas tengamos el derecho a elegir y nos dejen olvidarnos de la muerte para poder vivir tranquilos, es lo que hay….. tasio…….
Que alguien diga dónde está la dignidad donde solo hay dolor............., ¡eh infinita tristeza ¡…….
En días atrás un gran hombre valiente y sincero reconocía públicamente “que había ayudado a suicidarse a su mujer, que estaba muy agotada, que el momento es "muy doloroso por dos razones, en primer lugar porque supone una pérdida", y en segundo lugar, porque lo tenía que hacer él, ha estado sufriendo "mucho tiempo", ha sido "una mujer muy valiente", por lo que espera que "esto sirva para algo”.
Uno de tantos casos donde la muerte queda en entredicho, hace unos días nos enteramos que “una mujer con Alzheimer muere”, pero no busquen la noticia, porque no existe, la muerte la acatamos sin rechistar, extrañamente irrumpe sigilosamente al final de la vida sin el derecho a pedir el libro de reclamación, sabemos tan poco de ella que es la gran desconocida, nos dirán “medronco”, se sabe tampoco que miedo nos da el no vivir.
Otro caso a mencionar el de esta mujer que le diagnosticaron alzhéimer hace unos 12 años, desde ese mismo momento pidió a la familia “por favor, no esperéis a que me olvide de vosotros, a que no os reconozca como hijos o que no reconozca a papa, ese día me tenéis que ayudar a marchar”, les pidió.
Se incumplió su última voluntad como las de tantos otros, el derecho a la vida antes de nacer es muy opinable y a nadie se le obliga sistemáticamente la decisión, pero no al derecho a elegir un día fatídico a morir, este es un tema tabú políticamente, cuando el populismo y el buenismo dejen paso al sentido común, la muerte se dignificara cuando las personas tengamos el derecho a elegir y nos dejen olvidarnos de la muerte para poder vivir tranquilos, es lo que hay….. tasio…….