Como nunca será posible editar ningún libro más porque la lectura está declive y menos en el soporte papel; así que en los pueblos pequeños se hacen un mal marketing: no queremos que estos apuntes se vayan con nosotros; y encima... ya que hemos hablado de la Procesión de San Andrés, ¡que mejor empezar por el principio...! SALUDOS.
COFRADÍA DE LAS ÁNIMAS BENDITAS
La Cofradía de Ánimas fue fundada en 1655; siendo su primer mayordomo Manuel Santano. Muy unida a la Cofradía de la Vera Cruz y así se desprende de sus apuntes o anotaciones y como ejemplo sirva el siguiente apunte de 1756. Gasto de 10 reales por pintar el marco del Atar. 48 reales por comprar el Santísimo Cristo del Altar de la Ánimas del Purgatorio.
Constaba dicha cofradía de doce ordenanzas, y una de la más clarificadora de su función es la cuarta:
“ Ítem, que se hiciese al morir algún hermano de esta nuestra hermandad. El mayordomo haya de dar dos hachas y el estandarte para que le acompañe a su entierro, y el propio día encargar a nuestro capellán una misa por el alma de este difunto y venga obligatoriamente los cofrades a acompañar su cuerpo hasta que le entierre”.
Por aquella época aún no estaba el cementerio actual; ya que los enterramientos se hacían en la propia iglesia y sus aledaños. Así que no es de extrañar las siguientes anotaciones: “1755. Ítem 48 reales por mudar los huesos del Prosario y hacer el hoyo donde se enterrarán. Ítem pagados al Señor Cura y Sacristán por la misa cantada y entierro de los huesos, 47 reales”.
Entonces no había cuotas ni nada parecido. Su subsistencia se debía: …CONTINUARÁ. Saludos.
La Cofradía de Ánimas fue fundada en 1655; siendo su primer mayordomo Manuel Santano. Muy unida a la Cofradía de la Vera Cruz y así se desprende de sus apuntes o anotaciones y como ejemplo sirva el siguiente apunte de 1756. Gasto de 10 reales por pintar el marco del Atar. 48 reales por comprar el Santísimo Cristo del Altar de la Ánimas del Purgatorio.
Constaba dicha cofradía de doce ordenanzas, y una de la más clarificadora de su función es la cuarta:
“ Ítem, que se hiciese al morir algún hermano de esta nuestra hermandad. El mayordomo haya de dar dos hachas y el estandarte para que le acompañe a su entierro, y el propio día encargar a nuestro capellán una misa por el alma de este difunto y venga obligatoriamente los cofrades a acompañar su cuerpo hasta que le entierre”.
Por aquella época aún no estaba el cementerio actual; ya que los enterramientos se hacían en la propia iglesia y sus aledaños. Así que no es de extrañar las siguientes anotaciones: “1755. Ítem 48 reales por mudar los huesos del Prosario y hacer el hoyo donde se enterrarán. Ítem pagados al Señor Cura y Sacristán por la misa cantada y entierro de los huesos, 47 reales”.
Entonces no había cuotas ni nada parecido. Su subsistencia se debía: …CONTINUARÁ. Saludos.