Si tenemos la curiosidad y repasamos nuestra historia local, veremos que somos gente bastante impulsivas; cogemos las “cosas” con tanta vehemencia que después las olvidamos: como la gaseosa del tío Guijo que se fabricaba en Membrio, la del bolindre… como los cohetes fabricados por el propio aguacil Sr. Cornejo, que empezaban con mucho humo y disparaban a media altura… como la expectación despertada o explosión de júbilo… CONTINUARÁ. Saludos.
… porque Manuel Salgado… por ahora en mayo de 1891, porque había encontrado una mina, al parecer de plata y plomo en la dehesa boyal, por el camino de Valencia, yendo al “Alto de la Cotonera”, cerca del muro de “La Taberna”, hace tan solo 137 años. Sabemos que la memoria es frágil: pro siempre hay algo que nos hace recordar… como pasa ahora con el “COVID-19”… aquella visita que hicieron a nuestro cementerio… CONTINUARÁ. Saludos.
… con motivo del COLERA que padecimos en 1822; tanto el alcalde Tomás Suero, el médico-cirujano Nicolás Cava, el 2º alcalde y procurador sindico Diego Acuña; nuestro cura-parroco D. Miguel Cid, todos coincidieron diciendo: que los cadáveres están unos sobre otros, sin la tierra necesaria… con un levante desde el suelo extraordinario… y así es muy difícil que… CONTINUARÁ. Saludos.