UN INFORME RECIENTE de Global Witness vincula la demanda internacional de materias primas con el preocupante repunte de la deforestación en Brasil. Los últimos datos aportados por el gobierno de Brasil confirman que la deforestación ha aumentado a lo largo de 2020: se estima que este año se han producido un 25% más de incendios que en 2019, y sólo en Brasil, el 70% de las tierras despejadas en el Amazonas están ahora pobladas por ganado. Fuera de la Amazonía, en el Pantanal o en los bosques del Cerrado o en el Chaco argentino, es la expansión de la soja el principal motor de esta deforestación. Carne y soja que acaban en nuestros platos.
Mientras este problema siga existiendo y, lo que es peor, aumentando, no debería ser responsabilidad de la ciudadanía la ardua tarea de mirar las etiquetas para averiguar qué productos están o no relacionados con la deforestación después de un largo día de trabajo.
Mientras este problema siga existiendo y, lo que es peor, aumentando, no debería ser responsabilidad de la ciudadanía la ardua tarea de mirar las etiquetas para averiguar qué productos están o no relacionados con la deforestación después de un largo día de trabajo.