(1). ¡Vamos a ver… todas las tarde la “Organización, nos sugiere algo… como si no hubiese más gente! Bueno, vale...
Ya quedaron atrás estos instrumentos ensordecedores como eran “las matracas” de Semana Santa que aparecía en el “Miércoles de Tinieblas” porque las campanas se habían perdido, se decía. Las miradas atónitas de los más pequeños muchachos, no se dejaba esperar mirando al campanario; no dando CONTINUARÁ. Saludos.
Ya quedaron atrás estos instrumentos ensordecedores como eran “las matracas” de Semana Santa que aparecía en el “Miércoles de Tinieblas” porque las campanas se habían perdido, se decía. Las miradas atónitas de los más pequeños muchachos, no se dejaba esperar mirando al campanario; no dando CONTINUARÁ. Saludos.