RELATOS AL ATARDECER-CCLXXXIX
LAS PLUMAS. ¿Cuántas veces hacemos daño con nuestras palabras y con nuestras acciones? ¿Somos conscientes de esto? Reflexiona sobre por qué debemos ser más considerados y saber medir nuestras palabras y acciones antes de ocasionar algo de lo que podamos arrepentirnos.
Cuenta la historia que Genaro había calumniado a su amigo Carlos pues le tenía envidia porque había alcanzado el éxito muy rápido. Tiempo después, Genaro estaba arrepentido de la ruina que aquejaba a Carlos, todo debido a sus calumnias.
Genaro preocupado fue donde el hombre más sabio del pueblo y le contó lo sucedido: “Oh maestro, dime cómo puedo hacer. Quiero arreglar todo el mal que hice a mi amigo.”
El sabio le respondió: “Llena un saco con plumas ligeras y pequeñas y suelta una por una por donde vayas”. Genaro siguió el consejo del sabio, tomó su saco lleno de plumas y en un día ya había esparcido las pequeñas y livianas plumitas por todo el pueblo. Hecho esto, volvió donde el sabio y le dijo: ¡Ya lo hice! El sabio le respondió: ¿Fue fácil, verdad? Pues ahora coge nuevamente el saco y sal a la calle a buscar cada pluma que soltaste. ¡Júntalas!
Genaro respondió: Pero, ¿cómo voy a hacer eso? y salió muy triste y se sintió desdichado. No pudo encontrar ni diez de las que había dejado por el camino. Volvió donde el hombre sabio quien apenas lo vio le dijo: “Así como no pudiste encontrar las plumas porque volaron con el viento, igual pasó cuando hablaste mal de tu amigo. Contaste a uno, a otro y el boca a boca hizo un daño tremendo. El daño ya está hecho. Sólo te queda pedirle perdón a Carlos. No hay forma de revertir lo que hiciste”.
Reflexión. Mentir, calumniar, estafar y otras tantas acciones negativas no nos sirven. Borrémoslas de nuestra vida y seamos personas de bien. Antes de hacer o decir algo, tomemos unos minutos y pensemos, ¿estamos logrando algo bueno con lo que hacemos o decimos?, ¿estamos haciendo daño a alguien con nuestras palabras y acciones?, ¿somos veraces en nuestras declaraciones? Cada cosa que digas o hagas tendrá una consecuencia. Sé una persona justa y no seas egoísta, deja de pensar solo en ti y en tu beneficio; y ponte en los zapatos de la otra persona.
LAS PLUMAS. ¿Cuántas veces hacemos daño con nuestras palabras y con nuestras acciones? ¿Somos conscientes de esto? Reflexiona sobre por qué debemos ser más considerados y saber medir nuestras palabras y acciones antes de ocasionar algo de lo que podamos arrepentirnos.
Cuenta la historia que Genaro había calumniado a su amigo Carlos pues le tenía envidia porque había alcanzado el éxito muy rápido. Tiempo después, Genaro estaba arrepentido de la ruina que aquejaba a Carlos, todo debido a sus calumnias.
Genaro preocupado fue donde el hombre más sabio del pueblo y le contó lo sucedido: “Oh maestro, dime cómo puedo hacer. Quiero arreglar todo el mal que hice a mi amigo.”
El sabio le respondió: “Llena un saco con plumas ligeras y pequeñas y suelta una por una por donde vayas”. Genaro siguió el consejo del sabio, tomó su saco lleno de plumas y en un día ya había esparcido las pequeñas y livianas plumitas por todo el pueblo. Hecho esto, volvió donde el sabio y le dijo: ¡Ya lo hice! El sabio le respondió: ¿Fue fácil, verdad? Pues ahora coge nuevamente el saco y sal a la calle a buscar cada pluma que soltaste. ¡Júntalas!
Genaro respondió: Pero, ¿cómo voy a hacer eso? y salió muy triste y se sintió desdichado. No pudo encontrar ni diez de las que había dejado por el camino. Volvió donde el hombre sabio quien apenas lo vio le dijo: “Así como no pudiste encontrar las plumas porque volaron con el viento, igual pasó cuando hablaste mal de tu amigo. Contaste a uno, a otro y el boca a boca hizo un daño tremendo. El daño ya está hecho. Sólo te queda pedirle perdón a Carlos. No hay forma de revertir lo que hiciste”.
Reflexión. Mentir, calumniar, estafar y otras tantas acciones negativas no nos sirven. Borrémoslas de nuestra vida y seamos personas de bien. Antes de hacer o decir algo, tomemos unos minutos y pensemos, ¿estamos logrando algo bueno con lo que hacemos o decimos?, ¿estamos haciendo daño a alguien con nuestras palabras y acciones?, ¿somos veraces en nuestras declaraciones? Cada cosa que digas o hagas tendrá una consecuencia. Sé una persona justa y no seas egoísta, deja de pensar solo en ti y en tu beneficio; y ponte en los zapatos de la otra persona.