Pues si, fue un "cruceiro". Lástima que nunca hubo sensibilidad por estas cosas que nos habla de nuestro pasado. La última atrocidad fue aquel dintel, que nos hablaba de Felipe II, y qué se encuentra en los cimientos de un edificio. Claro, que también fue una decisión de no complicarse la vida, que es a lo que estamos, y la verdad... son cosas que no dan de comer. SALUDOS.