Nací en
Almaraz y allí crecí y viví muchos años. Después hube de marchar, pero mi
pueblo sigue viviendo en mí y yo en el. Espero que la
plaza quede como la conocimos los que, hace muchos años, jugábamos a los bolindres en ella y al
toro y a la peona y a la jurria y al corro, por ejemplo, aquello de tengo siete años, voy para ocho, el que tenga coj... Que se meta al corro. Un abrazo a mi pueblo del alma.