En el
camino de las Viñas en su margen derecha, podemos apreciar un precioso
almendro en
flor, "símbolo de la
primavera", cuando el
campo se engalana de vistosos
colores y agradables olores, que junto con el trinar de los pájaros acuden a mi mente los tiernos y maravillosos recuerdos de la infancia y adolescencia. Puedo decir que fué la mejor época de mi vida, porque vivía
feliz disfrutando de las personas queridas y de la
naturaleza que me rodeaba.
Sea esto mi testimonio de amor a mis seres queridos, ya que hicieron "mi mundo mágico en este pequeño
rincón".
A mis padres, abuelos y tíos.