Luz ahora: 0,11733 €/kWh

MOHEDAS: Hola, estimados paisanos extremeños:...

Hola, estimados paisanos extremeños:
Yo no soy de MOHEDAS, yo soy MOHEDAS. Sí, mi apellido es MOHEDAS. Soy un extremeño de la ausencia. Nací en Jaraicejo (Cáceres) y, por razones laborales, resido en Cataluña, donde ejerzo de profesor de Lenguas de la ESO. Conocía la existencia de vuestro querido pueblo porque, hace muchos años, por el año 1985, estuve en él. Me hice una foto con la señal de tráfico en la que se indica el nombre MOHEDAS, apellido que llevo humildemente con mucho orgullo en honor a mi padre ya fallecido, Isidro Mohedas, un san Isidro labrador extremeño, sí un santo por lo noble y por lo trabajador que fue. Como además de mi trabajo de profesor, escribo versos (tengo escritos cuatro libros de poesía), me he encontrado con paisanos vuestros en recitales y en fiestas y en hogares extremeños en Cataluña. Se han sorprendido de que un escritor lleve como apellido el nombre de su pueblo. Como me hace mucha ilusión todo esto, hoy, fiesta de Cataluña, me he decidido a entrar en vuestro foro y regalaros un poema que espero que os guste.
Un fuerte y afectuoso saludo de este extremeño que, aunque lejos físicamente de su Extremadura, está muy cerca espritual y afectivamente muy cerca de ella,
pues paso tres meses de vacaciones cada año en ella

WENCESLAO MOHEDAS RAMOS

ODA A LA ENCINA EXTREMEÑA

Por ser árbol tan noble y solidario,
protector de mi gente campesina,
hoy compongo este lírico homenaje
con efluvios que el alma me trasmina.

Porque siempre te evoco con cariño
en mi vida foránea, peregrina
y archivada te llevo en mi memoria,
asociada a mi infancia pueblerina.

Por imagen y emblema de mi tierra
y modelo ejemplar de disciplina,
de profunda y de sólida raigambre
y de recia dureza diamantina.

Por tu copa redonda, me recuerdas
la rotunda melena femenina
de las hijas morenas de esta tierra
de mirada tan casta y cristalina.

Con tu hermano floral, el alcornoque
tú compartes llanuras y colinas
de esas vastas dehesas extremeñas
donde pastan cochinos y merinas.

Como ubérrima, robusta matriarca,
una prole prolífica aglutinas
con ternuras maternas amparándola
del azote solar con chamusquina.

Las retamas, las jaras, los romeros,
los tomillos, los brezos… se coordinan
en familia floral, fraternalmente
por formarte una alfombra esmeraldina.

Tu robusto ramaje es apreciado
como impar combustible de cocina,
de parrillas, de estufas, de braseros…,
por materia más prima y genuina.

Nidifican las aves en tus ramas
con rumores de amor, de tremolina,
entre trinos, trasiegos y trajines
que la fiebre de amor les origina.

A un tropel de animales alimentas:
tu bellota es nutricia vitamina
de rebaños, manadas y piaras
y es del cerdo la grata golosina.

A tu sombra, los recios regadores
se refrescan la ardiente sofoquina
de las brasas y brisas estivales
con un rato de tregua en su rutina.

De tus ramas compuse mis juguetes
infantiles: el mocho, el tirachinas,
el garrote, los zancos…, tu bellota
fue mi grácil peonza danzarina.

Nos das tanto de forma solidaria,
mas el hombre - ¡un ingrato!- se acaína
y, blandiendo de fuego una quijada,
con pirómana mano te calcina.

Yo también, de una forma generosa,
doy mis versos, poética propina,
pero algunos, por necios, les mancillan
su pureza con baba viperina.

Hoy, por ser extremeño bien nacido
de una humilde progenie campesina,
te compongo esta lírica alabanza
porque hiciste en mi infancia de madrina.

WENCESLAO MOHEDAS
JARAICEJO (Cáceres)
PD.-Si os interesa la poesía extremeña, tenéis mucha poesía mía en internet. Con sólo marcar mi nombre y apellido en "Google", hallaréis gran cantidad de poemas.