Hoy he hojeado unas páginas de un libro que tenia casi olvidado, y la verdad es que el contenido de la historia es tremendamente humano. "Y he dicho, voy a escribir algo distinto" por si alguien tiene a bien leerlo, y al mismo tiempo sirve de relajación, en difinitiva, que pena que la vida pase tan de prisa ante nosotros.
<EL ANIMAL SILENCIOSO> En la mirada del animal silencioso hay un discurso que solo el alma del sabio puede comprender verdaderamente. En el crepúsculo de un hermoso día cuando la fantasia se apodera de mi mente, pasé por el borde de la ciudad y me detuve ante las ruinas de una casa abandonada, de la que solo quedaban las piedras. Entre las ruinas vi un perro que yacia sobre suciedad y cenizas, su piel estaba cubierta de úlceras y la enfermedad atormentaba su cuerpo débil, sus ojos tristes miraban al sol poniente y expresaban humillación y miseria. Me acerqué a él con el deseo desaber el lenguaje y pudiera consolarlo, pero solo logré aterrorizarlo, intentó levantarse sobre sus patas paralizadas, cayendose me echó una mirada en la que se mezclaba la ira con la súplica, en esa mirada habia un discurso más lúcido que el del hombre, y más conmovedor que las lágrimas de la mujer.
"Esto es lo que entendí que decia"Hombre sufrí la enfermedad que causo tu brutal persecución, huí de tu pié rudo y me refugié aquí, por que el polvo y las cenizas son más dulces que el corazón del hombre y éstas ruinas menos tristes que su alma, soy una miserable criatura que sirvió al hombre como fiel compañero, lo cuidaba noche y día, y lo recibia a su regreso con alegria, me contentaba con las migajas que caian de su mesa, pero cuando me volví viejo y enfermo, me sacó de su hogar y me abandonó a los despiadados jovenes de lascallejuelas. Veo el paralelismo que existe entre mi caso y el de tus prójimos imposibilitados por la edad, tambien veo un parecido entre mi suerte y la de una mujer que, en los días de su adorable juventud, alegró el corazón de un joven y que después, como madre, dedicó su vida a sus hijos, pero ahora, ya anciana, es ignorada y eludida. "Qué tiránico eres, hijo de Adán y que cruel". Así habló el silencioso animal, y mi corazón lo comprendió. Saludos: Sixto.
<EL ANIMAL SILENCIOSO> En la mirada del animal silencioso hay un discurso que solo el alma del sabio puede comprender verdaderamente. En el crepúsculo de un hermoso día cuando la fantasia se apodera de mi mente, pasé por el borde de la ciudad y me detuve ante las ruinas de una casa abandonada, de la que solo quedaban las piedras. Entre las ruinas vi un perro que yacia sobre suciedad y cenizas, su piel estaba cubierta de úlceras y la enfermedad atormentaba su cuerpo débil, sus ojos tristes miraban al sol poniente y expresaban humillación y miseria. Me acerqué a él con el deseo desaber el lenguaje y pudiera consolarlo, pero solo logré aterrorizarlo, intentó levantarse sobre sus patas paralizadas, cayendose me echó una mirada en la que se mezclaba la ira con la súplica, en esa mirada habia un discurso más lúcido que el del hombre, y más conmovedor que las lágrimas de la mujer.
"Esto es lo que entendí que decia"Hombre sufrí la enfermedad que causo tu brutal persecución, huí de tu pié rudo y me refugié aquí, por que el polvo y las cenizas son más dulces que el corazón del hombre y éstas ruinas menos tristes que su alma, soy una miserable criatura que sirvió al hombre como fiel compañero, lo cuidaba noche y día, y lo recibia a su regreso con alegria, me contentaba con las migajas que caian de su mesa, pero cuando me volví viejo y enfermo, me sacó de su hogar y me abandonó a los despiadados jovenes de lascallejuelas. Veo el paralelismo que existe entre mi caso y el de tus prójimos imposibilitados por la edad, tambien veo un parecido entre mi suerte y la de una mujer que, en los días de su adorable juventud, alegró el corazón de un joven y que después, como madre, dedicó su vida a sus hijos, pero ahora, ya anciana, es ignorada y eludida. "Qué tiránico eres, hijo de Adán y que cruel". Así habló el silencioso animal, y mi corazón lo comprendió. Saludos: Sixto.