Lo que ha hecho María Dolores de Cospedal, secretaria general del Partido Popular y presidenta de Castilla-La Mancha, supone en efecto retornar a la democracia orgánica, aquel ridículo invento del Caudillo de España por la Gracia de Dios, que trataba así de vender groseramente gato por liebre.
Tienen toda la razón nuestros amigos genoveses cuando comparan –como hemos publicado en ELPLURAL. COM- una democracia infame, que carece, pues, de, crédito, estimación y honra, con la democracia parlamentaria y constitucional. La de la Constitución de 1978.
Vías no transparentes
Cospedal ha retirado los sueldos a los diputados de la oposición, mientras los diputados de su partido han sido todos ellos recompensados por otras vías escasamente transparentes. Esta supuesta democracia cospedalina es, desde luego, una democracia caciquil y clientelista.
El conde de Romanones
Don Álvaro de Figueroa y Torres, conde de Romanones –nacido en Madrid el año 1865 y fallecido el año 1950- fue uno de los caciques más célebres durante la Restauración de Cánovas y Sagasta. Su feudo era la provincia de Guadalajara. Ganaba Romanones siempre ahí, en las elecciones apañadas de la época. A veces vencía sin candidato en contra. El pucherazo era el instrumento más utilizado en la pseudodemocracia de los caciques.
Golpe de estado palaciego
Cospedal debería ser destituida de sus cargos por el presidente del PP y del Gobierno, Mariano Rajoy Brey. ¿Cómo puede ser que la número dos del PP y presidenta castellano manchego se haya cargado –merced a un golpe de estado palaciego- la esencia de la democracia y nadie le haya recriminado en Génova 13 o en el Palacio de la Moncloa.
La herencia franquista
Una vez más, los populares exhiben su herencia franquista. La del cara al sol y las montañas nevadas. La de los falangistas que, según su fundador, José Antonio Primo de Rivera -hijo del general golpista y dictador Miguel Primo de Rivera-, “las urnas están para ser rotas”. El fascismo español ya cuenta con una notable fan: María Dolores de Cospedal, conocida como la bien pagá.
Tienen toda la razón nuestros amigos genoveses cuando comparan –como hemos publicado en ELPLURAL. COM- una democracia infame, que carece, pues, de, crédito, estimación y honra, con la democracia parlamentaria y constitucional. La de la Constitución de 1978.
Vías no transparentes
Cospedal ha retirado los sueldos a los diputados de la oposición, mientras los diputados de su partido han sido todos ellos recompensados por otras vías escasamente transparentes. Esta supuesta democracia cospedalina es, desde luego, una democracia caciquil y clientelista.
El conde de Romanones
Don Álvaro de Figueroa y Torres, conde de Romanones –nacido en Madrid el año 1865 y fallecido el año 1950- fue uno de los caciques más célebres durante la Restauración de Cánovas y Sagasta. Su feudo era la provincia de Guadalajara. Ganaba Romanones siempre ahí, en las elecciones apañadas de la época. A veces vencía sin candidato en contra. El pucherazo era el instrumento más utilizado en la pseudodemocracia de los caciques.
Golpe de estado palaciego
Cospedal debería ser destituida de sus cargos por el presidente del PP y del Gobierno, Mariano Rajoy Brey. ¿Cómo puede ser que la número dos del PP y presidenta castellano manchego se haya cargado –merced a un golpe de estado palaciego- la esencia de la democracia y nadie le haya recriminado en Génova 13 o en el Palacio de la Moncloa.
La herencia franquista
Una vez más, los populares exhiben su herencia franquista. La del cara al sol y las montañas nevadas. La de los falangistas que, según su fundador, José Antonio Primo de Rivera -hijo del general golpista y dictador Miguel Primo de Rivera-, “las urnas están para ser rotas”. El fascismo español ya cuenta con una notable fan: María Dolores de Cospedal, conocida como la bien pagá.