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O le tiene cogido Bárcenas por los testículos o este presidente es un pobre diablo
09/07/2013
123451 VOTO
IMPRIMIRENVIAR A UN AMIGO
¿Por qué a Mariano Rajoy le costó tanto prescindir de Luis Bárcenas, imputado ya por sus relaciones con la trama Gürtel? Hace ahora casi cuatro años, el 28 de julio del año 2009, la cúpula del PP difundió una nota oficial que no tiene desperdicio.
Un panegírico en favor del tesorero infiel
Aquel documento fue una especie de panegírico en honor del tesorero infiel: “El Partido Popular quiere manifestar su reconocimiento a los más de 28 años de servicio de Luis Bárcenas a nuestro partido, que han sido ejemplo de profesionalidad y buen hacer. El Partido Popular expresa su respeto hacia la decisión de Luis Bárcenas, tesorero del Partido Popular, de presentar su renuncia a su actual responsabilidad. La decisión de nuestro tesorero (…) demuestra su lealtad una vez más hacia nuestra organización (…)”
En roman paladino
Y más tarde el presidente del PP y del Gobierno de España dijo de pronto y públicamente: “Estoy convencido de que nadie podrá probar que [Bárcenas] no es inocente”. Y, durante mucho tiempo, Rajoy se ha negado a pronunciar el nombre de Bárcenas. Todo esto -dicho en roman paladino- parece que este multimillonario ladrón popular -encarcelado sin fianza por orden judicial- tiene cogido y bien cogido al presidente por sus testículos. O también podría ser que el presidente fuera un pobre diablo que no se entera, o no se quiere enterar, de lo que está pasando en este país desde que estalló el caso Gürtel.
Indicios racionales
De los trajes gratis total de otro pobre diablo como es Francisco Camps pasamos a asistir obligadamente al nauseabundo espectáculo de un presidente que se esconde en su armario, incapacitado para dar la cara, probable cómplice de Bárcenas, según se desprende de indicios racionales como pueden leerse en la nota de complacencia y de admiración de julio de 2009 en favor de un sinvergüenza que ya entonces se encontraba en el punto de mira de la Justicia
09/07/2013
123451 VOTO
IMPRIMIRENVIAR A UN AMIGO
¿Por qué a Mariano Rajoy le costó tanto prescindir de Luis Bárcenas, imputado ya por sus relaciones con la trama Gürtel? Hace ahora casi cuatro años, el 28 de julio del año 2009, la cúpula del PP difundió una nota oficial que no tiene desperdicio.
Un panegírico en favor del tesorero infiel
Aquel documento fue una especie de panegírico en honor del tesorero infiel: “El Partido Popular quiere manifestar su reconocimiento a los más de 28 años de servicio de Luis Bárcenas a nuestro partido, que han sido ejemplo de profesionalidad y buen hacer. El Partido Popular expresa su respeto hacia la decisión de Luis Bárcenas, tesorero del Partido Popular, de presentar su renuncia a su actual responsabilidad. La decisión de nuestro tesorero (…) demuestra su lealtad una vez más hacia nuestra organización (…)”
En roman paladino
Y más tarde el presidente del PP y del Gobierno de España dijo de pronto y públicamente: “Estoy convencido de que nadie podrá probar que [Bárcenas] no es inocente”. Y, durante mucho tiempo, Rajoy se ha negado a pronunciar el nombre de Bárcenas. Todo esto -dicho en roman paladino- parece que este multimillonario ladrón popular -encarcelado sin fianza por orden judicial- tiene cogido y bien cogido al presidente por sus testículos. O también podría ser que el presidente fuera un pobre diablo que no se entera, o no se quiere enterar, de lo que está pasando en este país desde que estalló el caso Gürtel.
Indicios racionales
De los trajes gratis total de otro pobre diablo como es Francisco Camps pasamos a asistir obligadamente al nauseabundo espectáculo de un presidente que se esconde en su armario, incapacitado para dar la cara, probable cómplice de Bárcenas, según se desprende de indicios racionales como pueden leerse en la nota de complacencia y de admiración de julio de 2009 en favor de un sinvergüenza que ya entonces se encontraba en el punto de mira de la Justicia