Manifestación de la derechona, este domingo por la mañana en la plaza Colón de Madrid, a un paso de Génova 13. La derecha es humana y también tiene nostalgia de un pasado en el que atacaba sin piedad al Gobierno socialista. Recuerdan orgullosos los peperos aquellas manifestaciones contra ETA. Pero, a la hora de la verdad, gritaban insultando a Zapatero y su Gobierno. Volverán, pues, los militantes del PP a desahogarse atacando a Zapatero. Su slogan reiterado fue vomitivo: “Zapatero, vete con tu abuelo”.
Otra víctima del franquismo
El abuelo de ZP, un disciplinado oficial del Ejército, fue fusilado por sus compañeros porque no quiso sublevarse contra la República ni participar en el golpe de Estado. Ello le costó la vida. Fue una víctima más del franquismo. Las víctimas del franquismo de hecho no existen. Investigar dónde están los restos de las víctimas le supuso a Garzón su muerte profesional.
El fin de ETA
Vociferarán los manifestantes indignados porque los asesinos de ETA saldrán antes de las cárceles, conforme a la doctrina del Tribunal de Estrasburgo. Pero olvidarán deliberadamente lo más importante. Estamos asistiendo al fin de ETA. Hace más de tres años que ya no mata.
El monstruo de Frakestein
Esta manifestación la forzaron Ángeles Pedraza, presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, y el inolvidable Francisco José Alcaraz, presidente ahora de Voces contra el Terrorismo. No se sabe si hablará Pedraza y, probablemente, también Alcaraz. Y, de pronto, el líder conservador, Mariano Rajoy Brey, cayó en la cuenta de que podían ir los manifestantes no sólo contra Zapatero, sino además contra él. A Rajoy le ocurre como al doctor Frankestein que el monstruo no lo pudo controlar. Rajoy dijo sí a las numerosas manifestaciones que se hicieron orientadas por Génova 13 y dirigiéndola, entre otros, Alcaraz.
Cambio de criterio
Y en estos días el líder de pacotilla tiene miedo. Tanto que cambió de criterio -él es un oportunista consumado- y tras haber declarado que el PP no apoyaría esa concentración de indignados, reculó y su partido asistirá por consiguiente a la mani. Él no estará presente. Le entran cagarrinas pensando que los suyos -que son mayoritariamente los montaraces de José María Aznar y FAES- podrían vapulearle a gritos de ¡cobarde y de traidor!
A su casa cuanto antes
Así gobierna Rajoy: a golpe de oportunismo. Esta es su mejor virtud. Hasta el día de hoy le ha ido bien esta estrategia. Pero queda confirmado que Rajoy pasa de las víctimas de ETA. Juega con todas las cartas y hace trampas para salir victorioso. La crisis fue su talismán más navajero. Rajoy se acuerda de las víctimas -no digamos las de Franco porque ésas no existen- tratando de salvarse él. Un sector influyente del PP procura siempre que cuanto antes mejor se vaya a su casa.
Otra víctima del franquismo
El abuelo de ZP, un disciplinado oficial del Ejército, fue fusilado por sus compañeros porque no quiso sublevarse contra la República ni participar en el golpe de Estado. Ello le costó la vida. Fue una víctima más del franquismo. Las víctimas del franquismo de hecho no existen. Investigar dónde están los restos de las víctimas le supuso a Garzón su muerte profesional.
El fin de ETA
Vociferarán los manifestantes indignados porque los asesinos de ETA saldrán antes de las cárceles, conforme a la doctrina del Tribunal de Estrasburgo. Pero olvidarán deliberadamente lo más importante. Estamos asistiendo al fin de ETA. Hace más de tres años que ya no mata.
El monstruo de Frakestein
Esta manifestación la forzaron Ángeles Pedraza, presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, y el inolvidable Francisco José Alcaraz, presidente ahora de Voces contra el Terrorismo. No se sabe si hablará Pedraza y, probablemente, también Alcaraz. Y, de pronto, el líder conservador, Mariano Rajoy Brey, cayó en la cuenta de que podían ir los manifestantes no sólo contra Zapatero, sino además contra él. A Rajoy le ocurre como al doctor Frankestein que el monstruo no lo pudo controlar. Rajoy dijo sí a las numerosas manifestaciones que se hicieron orientadas por Génova 13 y dirigiéndola, entre otros, Alcaraz.
Cambio de criterio
Y en estos días el líder de pacotilla tiene miedo. Tanto que cambió de criterio -él es un oportunista consumado- y tras haber declarado que el PP no apoyaría esa concentración de indignados, reculó y su partido asistirá por consiguiente a la mani. Él no estará presente. Le entran cagarrinas pensando que los suyos -que son mayoritariamente los montaraces de José María Aznar y FAES- podrían vapulearle a gritos de ¡cobarde y de traidor!
A su casa cuanto antes
Así gobierna Rajoy: a golpe de oportunismo. Esta es su mejor virtud. Hasta el día de hoy le ha ido bien esta estrategia. Pero queda confirmado que Rajoy pasa de las víctimas de ETA. Juega con todas las cartas y hace trampas para salir victorioso. La crisis fue su talismán más navajero. Rajoy se acuerda de las víctimas -no digamos las de Franco porque ésas no existen- tratando de salvarse él. Un sector influyente del PP procura siempre que cuanto antes mejor se vaya a su casa.