Rencor silencioso
A la ex ministra del PSOE Magdalena Álvarez la ha imputado, desimputado y reimputado en un santiamén. ¿Hay quien de más en el ámbito de las togas, que tan pausadamente van a la hora de la verdad y de las sentencias? Esta especie de rencor silencioso, que se atisba sólo mirándola, a ella no le preocupa en absoluto. Haga lo que haga, está acostumbrada a ir tirando adelante y adiós muy buenas. Más que jueza viene a ser una enamorada del Partido Popular.
Algo inaudito
Su velocidad, buscando delitos a todo dios que se le ponga por delante -siempre que sea de UGT o un cargo o ex cargo, del Gobierno andaluz- es algo inaudito. A la que se distraiga un poco Magdalena Álvarez chocará con una fianza civil de 29. 568.129 euros. No deja de ser curioso -y al mismo tiempo enojoso- que pasen estas cosas tan graves en este país.
Máxima rapidez posible
La jueza instructora del caso de los EREs andaluces, Mercedes Alaya, ha batido algún que otro record con su decisión de ir a por todas, y a la máxima rapidez posible, también en el caso de Magdalena Álvarez. ¿La justicia es a veces partidista? Sin duda alguna.
Los otros pero no los suyos
De modo que Alaya es una mujer firme y una jueza que transmite severidad a quienes tiene en el banquillo, digamos, y a punto de ser condenados los otros pero no los suyos. Es famosa, ciertamente. Pero hay dudas razonables acerca de si, en realidad, es una jueza o es, simplemente, una dirigenta de la derecha política.
A la ex ministra del PSOE Magdalena Álvarez la ha imputado, desimputado y reimputado en un santiamén. ¿Hay quien de más en el ámbito de las togas, que tan pausadamente van a la hora de la verdad y de las sentencias? Esta especie de rencor silencioso, que se atisba sólo mirándola, a ella no le preocupa en absoluto. Haga lo que haga, está acostumbrada a ir tirando adelante y adiós muy buenas. Más que jueza viene a ser una enamorada del Partido Popular.
Algo inaudito
Su velocidad, buscando delitos a todo dios que se le ponga por delante -siempre que sea de UGT o un cargo o ex cargo, del Gobierno andaluz- es algo inaudito. A la que se distraiga un poco Magdalena Álvarez chocará con una fianza civil de 29. 568.129 euros. No deja de ser curioso -y al mismo tiempo enojoso- que pasen estas cosas tan graves en este país.
Máxima rapidez posible
La jueza instructora del caso de los EREs andaluces, Mercedes Alaya, ha batido algún que otro record con su decisión de ir a por todas, y a la máxima rapidez posible, también en el caso de Magdalena Álvarez. ¿La justicia es a veces partidista? Sin duda alguna.
Los otros pero no los suyos
De modo que Alaya es una mujer firme y una jueza que transmite severidad a quienes tiene en el banquillo, digamos, y a punto de ser condenados los otros pero no los suyos. Es famosa, ciertamente. Pero hay dudas razonables acerca de si, en realidad, es una jueza o es, simplemente, una dirigenta de la derecha política.