Hola Julia, con tanto ganado no olvidemos las moscas, en verano eran una calamidad. Las cortinas de mimbres minimizaban el problema. Hoy se ven muy pocas.
Por París todo bien.
Con el renacimiento de la naturaleza la Suiza tiene que estar preciosa entre montañas y valles.
Feliz domingo Julia, un abrazo.
¡! ¡! Las moscas ¡! ¡! que plaga, se las sabían todas, ni cortinas ni nada a la menor ya estaban dentro.
Una vez, yo tendría siete u ocho años, mi madre había blanqueado la
casa, y se fue a lavar la ropa al cerro, nos dijo: no abrir las
ventana que no entren las moscas, nosotros ni caso. La casa se llenó de moscas, cuando nos dimos cuenta, empezamosa hecharlas fuera con las toallas, paños de cocina, en fin con lo que pillamos, cuando mi madre llegó, la casa estaba que parecia que había pasado un
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¿tienes una panadería?
