Me permito hacer una corrección. En esa casa nunca vivió un cura, sino la hermana de una cura y es posible que él fuera a comer allí, si no a diario sí frecuentemente. El cura de Santa Ana, desde los años 40, disponía de la casa parroquial. Y ése fue siempre el mismo, es decir, Don Lorenzo Canelo. La casa de la Cerquilla que muestra la foto se llamó toda la vida "La casa de la señorita", una mujer que se llamaba Doña Soledad, que yo la recuerdo muy vieja y encorvada...