SANTA CRUZ DE LA SIERRA: CAPITULO 40...

CAPITULO 40
Después de haberle contado la historia a Don Quijote le acabo pidiendo que por favor fuese a luchar con Malambruno ya que este había dicho que solo desharía el encantamiento en caso de que Don Quijote de la Mancha fuese a luchar contra él. Cuando Don Quijote acepto la Trifaldi le dijo que Malambruno había dicho que mandaría un caballo de madera, llamado Clavileño, el cual llevaría a Sancho y a Don Quijote a donde se encontraba él, que estaba a 3220 leguas por el aire y en línea recta sobre Clavileño.
CAPITULO 41
Por la noche llevaron a Don Quijote y a Sancho hacia el caballo y le dijeron que deberían taparse los ojos porque la altitud que iban a alcanzar era muy grande y le podían marear. Don Quijote y Sancho accedieron, y al momento les dijeron que para activar el caballo había que mover una clavija que se encontraba en el cuello del caballo. Y para bajarse del caballo cuando llegasen tendrían que esperar a que este relinchara.
Cuando Don Quijote apretó la clavija todos los allí presentes se despedían como si realmente se estuvieran moviendo, incluso imitaban el calor de la altitud y el movimiento del viento. Al cabo de un rato los allí presentes encendieron la cola de Clavileño el cual al estar lleno de cohetes salió disparado por el aire tirando a Don Quijote y a Sancho al suelo. Cuando se levantaron vieron que no se habían movido de lugar y que a su alrededor estaban los mismos personajes que antes y observaron también que junto a ellos había una lanza con un mensaje el cual decía que Don Quijote había vencido con solo intentarlo y que Malambruno se contentaba con eso y había desencantado a la Trifaldi y a sus doncellas. También decía que igualmente se desencantaría Dulcinea en cuanto Sancho cumpliera lo prometido. Cuando el Duque leyó la carta felicito efusivamente a Don Quijote por su hazaña.
Sancho le dijo a la Duquesa que durante su viaje en Clavileño se había quitado el pañuelo y había visto como el mudo y las personas eran muy pequeñas desde esas alturas, la Duquesa al decirle que eso era imposible Sancho le respondió que mediante el encantamiento nada era imposible. Sancho prosiguió contando que había estado tan cerca del sol que había podido comprobar que realmente era muy grande, también dijo que se habían detenido en la constelación de las siete cabrillas ya que como Sancho había sido cabrero se entretuvo un poco con ellas.
CAPITULO 42
Cuando los Duques se dieron cuenta de que las bromas funcionaban y Don Quijote y Sancho no se daban cuenta de nada decidieron proseguir con ellas para reírse más. Mas tarde el Duque le dijo a Sancho que se preparara por que al día siguiente irían a la ínsula en la que Sancho gobernaría. Al oír esto Don Quijote se apartó con Sancho un momento para aconsejarle acerca de cómo tenia que comportarse como gobernador de una ínsula.
Primero la aconsejó acerca del alma. Don Quijote le dice que se haga amigo de Dios, que no se avergüence de su linaje ya que si no se avergüenza él nadie se avergonzara nunca de él. También le dijo que en caso de que fuesen sus parientes a visitarlos que no los desprecie y en caso de que enviudase que supiera elegir bien a la mujer ya que en ocasiones son estas las que ayudar a gobernar. También le dijo que juzgase igual a un rico que a un pobre pero que atendiese mas a las lagrimas de un pobre ya que son los que no tienen nada en este mundo.