Hola mis queridos paisanos, me da alegria ver que esto se anima, pues siempre escribimos los mismos, y de verdad que llega aburrir un poco.
Me he alegrado ver gente que fué a la escuela con Doña Petra, que buena maestra era, fué mi primera maestra la que me enseñó las vocales y la tabla de multiplicar cantada, que tiempos mas hermosos, alguien ha recordado la leche en polvo, y yo os recuerdo la mantequilla, que contenta iba con mi leche y mi mantequilla y se la daba a mis abuelos y tita, luego pasamos a las escuelas, mi maestra en esa epoca era Mª Jesús, a la que tuve el gusto de ver hace unos años en Descargamaria, no recuerdo haber ido a otra escuela como dice Victorio, ¡cuantos recuerdos!
Mi juego favorito eran las boregallas, intentar meterlas en un agujero que nosotros elegiamos entre las piedras de la calle abajo, el escondite, corriendo sus callejuelas, Elena, la nieta de tia Sebastiana, y yo, nos tirabamos tardes enteras jugando, hasta que llegaban las cabras, y saliamos corriendo para casa, era el horario establecido, ni un minuto nos saltabamos, porque de lo contrario habria castigo.
Bueno Chencho, Loren, maria, marisol y mi gran amigo Victorio, os deseo lo mejor a todos, y espero ponerles cara a los que no conozco, o hace años que no veo. Abrazos maribel
Me he alegrado ver gente que fué a la escuela con Doña Petra, que buena maestra era, fué mi primera maestra la que me enseñó las vocales y la tabla de multiplicar cantada, que tiempos mas hermosos, alguien ha recordado la leche en polvo, y yo os recuerdo la mantequilla, que contenta iba con mi leche y mi mantequilla y se la daba a mis abuelos y tita, luego pasamos a las escuelas, mi maestra en esa epoca era Mª Jesús, a la que tuve el gusto de ver hace unos años en Descargamaria, no recuerdo haber ido a otra escuela como dice Victorio, ¡cuantos recuerdos!
Mi juego favorito eran las boregallas, intentar meterlas en un agujero que nosotros elegiamos entre las piedras de la calle abajo, el escondite, corriendo sus callejuelas, Elena, la nieta de tia Sebastiana, y yo, nos tirabamos tardes enteras jugando, hasta que llegaban las cabras, y saliamos corriendo para casa, era el horario establecido, ni un minuto nos saltabamos, porque de lo contrario habria castigo.
Bueno Chencho, Loren, maria, marisol y mi gran amigo Victorio, os deseo lo mejor a todos, y espero ponerles cara a los que no conozco, o hace años que no veo. Abrazos maribel