Hola Victorio, no te preocupes, ni tú ni ningun paisano que no pueda venir a las fiestas, si Dios quiere iré, pero con mucha pena no te podré contar mucho, a penas salgo, solo con mi madre, y poco puedo ver, pero de toda las maneras intentaré ser vuestra portavoz, los ojos y los oidos de los que estan lejos, y sienten añoranzas de estas fiestas, que por cierto ya llevan con nosotros la friolera de 40 años, pero parece que fué ayer cuando comenzaron, todavia recuerdo aquel año era muy jovencita, casi una niña, recuerdo que bajé con mi tia, ella no me dejaba ir sola, y claro lo que ví fué ganado, pensaba que habria otras cosas, comí en el pajar de pilar (Maripi) para los amigos, comida que llevó su madre, tia Librada, todavia lo tengo fresco en mi memoria, cuánto ha llovido desde entonces, y cuánto ha cambiado todo, y todas las personas que faltan, madre mia, mejor no quiero pensarlo, mis abuelos compraron un mulo, el cual me acompañó a muchos viajes a por agua, y monté en su lomo, era manso, muy manso, jamás me rompió un cántaro, y nunca me tiró, que tiempos aquellos, que maravilla recordarlos, bueno ya os contaré si alguna anécdota hubiera que contar, espero poneros al corriente de todo, un abrazo muy fuerte para todos mis paisanos. Maribel