Simpática historia la de los Kakis... ESTO ME RECUERDA: bueno, la recordé hace poco en Monte Mayor en mi paso por esas vuestras tierras, cuando empaquetaba un jamón de esos de pata oscura, por cierto aún queda.
pasé la Frontera con Francia, avanzada la noche, con mi viejo peugeot, y en la misma frontera, ningún problema, si una insistente mirada a una pegatina, que ocultaba el oxido en una aleta. Con yn par de botellas de Maie Brizart y un jamón, adquirido en Burgos: mi primer jamón caro: 3.000 pts.
"Usted entiende"- dijo el dueño de la tienda, cuando le dije: quiero el mejor.! Ya podía ser bueno, me estba yo diciendo, mientras me hacía cuentas que el salario medio mensual por aquel entonces era de la mitad de esa cantidad. Contento con mi carga en la que no faltó un cartón de bisonte, enfilé hacia Paris, contento de haber pasado el susto...! pero no! En una curba, a la salida de un pueblo a unos 50 kilometros de la frontera, unas líternas amarecieron de las sombras y de inmediato me vi rodeado de los CRS, que me ordenaron abrir el capó: unos miraban bajo los asientos y yo veís como otro pe revolvía todo, sacando mis cosas y posándolas sobre el suelo. Ni caso a las botellas, ni al tabaco, ni tan siquiera al jamón..."Buena pieza" dijo uno en mal español: Yo callé, o a lo mejor sonreí mientra pensaba; "! adios! a mi jamón, pero no; se olvidaron de todo y continuaron en su registro, sobre todo en el hueco de la aleta izquierda de mi 404
hasta que al final sacaron un pedazo de periódico, sin duda un envoltorio de unos paquetes de tabaco del viaje en el verano anterior. Con sus escusas me dejaron marchar. Pensé que buscaban otra cosa y que la insistente mirada en la aduana, fue un aviso sobre mi vehículo co sospechoso.
El jamón fue el mejor que yo había probado nunca... tal vez por el susto...
El problema me ha llegado cuando estaba terminando de contar mi aventura: Se ha marchado la luz. Creo haberlo recuperado salidos Antonio, saludos a todos
LIBETAD.
pasé la Frontera con Francia, avanzada la noche, con mi viejo peugeot, y en la misma frontera, ningún problema, si una insistente mirada a una pegatina, que ocultaba el oxido en una aleta. Con yn par de botellas de Maie Brizart y un jamón, adquirido en Burgos: mi primer jamón caro: 3.000 pts.
"Usted entiende"- dijo el dueño de la tienda, cuando le dije: quiero el mejor.! Ya podía ser bueno, me estba yo diciendo, mientras me hacía cuentas que el salario medio mensual por aquel entonces era de la mitad de esa cantidad. Contento con mi carga en la que no faltó un cartón de bisonte, enfilé hacia Paris, contento de haber pasado el susto...! pero no! En una curba, a la salida de un pueblo a unos 50 kilometros de la frontera, unas líternas amarecieron de las sombras y de inmediato me vi rodeado de los CRS, que me ordenaron abrir el capó: unos miraban bajo los asientos y yo veís como otro pe revolvía todo, sacando mis cosas y posándolas sobre el suelo. Ni caso a las botellas, ni al tabaco, ni tan siquiera al jamón..."Buena pieza" dijo uno en mal español: Yo callé, o a lo mejor sonreí mientra pensaba; "! adios! a mi jamón, pero no; se olvidaron de todo y continuaron en su registro, sobre todo en el hueco de la aleta izquierda de mi 404
hasta que al final sacaron un pedazo de periódico, sin duda un envoltorio de unos paquetes de tabaco del viaje en el verano anterior. Con sus escusas me dejaron marchar. Pensé que buscaban otra cosa y que la insistente mirada en la aduana, fue un aviso sobre mi vehículo co sospechoso.
El jamón fue el mejor que yo había probado nunca... tal vez por el susto...
El problema me ha llegado cuando estaba terminando de contar mi aventura: Se ha marchado la luz. Creo haberlo recuperado salidos Antonio, saludos a todos
LIBETAD.