Que bonita poesía, leyéndola creía ver a mi tío Elias, a tío Andres, a tío Julian, a mi tío Santiago ese no araba, ni iba a por bellotas, ese hacía las mejores y mas fuertes sillas del mundo, aguantaban dos y tres generaciones.
Que descansen en paz los cuatro
Que descansen en paz los cuatro