Aplaudo éste comentario, aunque me temo que permanecerá en el más absoluto olvido, como siempre. No sólo una limpieza de hierbas y matojos, si no de basura orgánica también.
Tratándose del tesoro de Talayuela y de la envidia de los alrededores, es una lástima que cada día, al pasear por el viejo pinar, se pueda descubrir un nuevo montón de basura o los rastros de un cambio de aceite de un viejo coche, en medio del camino.
Por desgracia sigue existiendo la doble moral, como es reivindicar una limpieza... Pedimos que limpien el pinar de talayuela, hay mucha gente parada en el inem.