Este era el modelo de cartilla equivalente a la actual Seguridad Social. Mi abuelo la dejó entre sus recuerdos, quizás para hacerme reflexionar sobre el progreso y el estado del bienestar que tenemos ahora, y que nada caiga en el olvido.
En ella los empresarios apuntaban el Alta/Baja e igualmente se registraban los pagos mensuales.
Me llaman la atención dos advertencias escritas al final de la cartilla, las cuales transcribo literalmente porque no tienen desperdicio.
1ª.-- El Seguro de Enfermedad te protege contra la MISERIA cuando estás enfermo y te devuelve la SALUD.../...
5ª.-- Si no se PAGAN las primas del Seguro mientras trabajas puedes perder la indemnización y la asistencia médica y farmacéutica en la ocupación y en el paro.../...
Si somos capaces de verlo con una perspectiva objetiva, debemos considerar que el modelo sanitario público vigente - pese a sus defectos - es uno de los mejores regalos para nuestra salud; toda una conquista social y una garantía de mínimos para el bienestar desde el nacimiento hasta la ancianidad.
¡SALUD!
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