Nada hija, tengo que ir otro dia, porque aquel día se me hizo tarde y no logré encontrarlo.
Las castañas, aunque eran muy pequeñas, estaban deliciosas, a mí me encantan, sobre todo asadas.
Un besito Teresa jamas me avía fijado en el detallé del campanario y eso que vivía justo al lado de la iglesia, estaban ricas las castañas encontraste el olivo perdido, que gozada andar por esos campos con lo que a mi me gusta un saludo Un buen teleobjetivo bien guiado nos ha acercado a todos a la cúspide de la iglesia. En su momento parece que estuvo alicatada con cerámica y todo, pero ya se ve que está muy descarnada. Miles de días y de noches la contemplan. Sea del siglo que sea ¿XVI? ha sufrido muchos cambios de estación y lo que del cielo le haya llegado. Saludos al artista que nos está acercando el pueblo con una óptica exquisita, Bueno, y a su mami también. ¡Gracias! Tere que detalle del campanario, nunca me habia fijado, en él. Supongo que a simple vista no se vé, pero con las cámaras de hoy día, hasta el minimo detalle, se puede ver. Claro que tan alto, no se nos ocurre mirar, felicita a tu hijo supongo que es de él, también la foto, un saludo.