Bueno, a ver quién se anima a ofrecernos una pequeña crónica objetiva de la jornada de Romería para ponernos al día a los torrenautas de larga distancia. Qué olorcito a ibérico y qué jartá de colesterol 210 enriquecido que nos metemos entre pecho y espalda cada vez que vamos por allí. Ese secreto, esa pancetita, esa prueba.... manjar de dioses. Espero que hayáis pasado un buen día, de verdad. Saludos.