No se me puede olvidar, cuando un día de pequeña, no tendría mas de 6 años, estaba jugando a los alfileres delante de la casa de Catalina, sentadas en el poyete, cuando llegó tu madre y me dijo: Abre las manos, venga,! que abras las manos!. Apretaba tanto que casi me los clavaba. A continuación, oía decir a tu madre: ¡Josefa! Esta muchacha mira lo que tenía en las manos,. Pues hija, no me daba tiempo a ganar ninguna partida JAjajajajajajajaja. tengo tantos recuerdos de ella..........