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Cada día, miles de personas consultan en diarios y revistas su horóscopo y, según las estadísticas, más de un 60 por ciento creen el él. En esta época de crisis y de incertidibre. La Astrología está más de moda que nunca y es objeto de estudio en numerosas universidades. Sin embargo, la divulgación a nivel popular de la que ha sido objeto no ha hecho sino perjudicar grandemente a la Ciencia de las Estrellas.
Si bien muchos autores han pretendido establecer las bases de la Astrología basándose en el axioma hermético que afirma que " como es arriba, así abajo ", esta ciencia es indudablemente anterior al hermitismo griego. Practicada por los rishis védicos, por magos caldeos o por los sacerdotes egipcios, La Astronomía medieval e incluso la actual se nos aparecen más como vestigios de un antiguo saber, anterior quizás a los tiempos históricos, que como una ciencia nueva. Estos vestigios están, sin duda alguna, conectados con otros restos de un saber oculto, como podrían ser las ciencias mánticas, pero desgraciadamente separados de él. Esta particularidad permite, sin embargo, que hoy día La Astrología pueda estudiarse y páracticarse fuera de todo un contexto de tipo místico o iniciatico, que, necesariamente, limitaba su audiencia. Si bien este hecho ha podado el árbol astrológico dde muchas de sus ramas, es innegable que gracias a él un número cada día creciente de personas, se interesa de un modo serio y sincero por la astrológia y accede a su conocimiento.
Si bien muchos autores han pretendido establecer las bases de la Astrología basándose en el axioma hermético que afirma que " como es arriba, así abajo ", esta ciencia es indudablemente anterior al hermitismo griego. Practicada por los rishis védicos, por magos caldeos o por los sacerdotes egipcios, La Astronomía medieval e incluso la actual se nos aparecen más como vestigios de un antiguo saber, anterior quizás a los tiempos históricos, que como una ciencia nueva. Estos vestigios están, sin duda alguna, conectados con otros restos de un saber oculto, como podrían ser las ciencias mánticas, pero desgraciadamente separados de él. Esta particularidad permite, sin embargo, que hoy día La Astrología pueda estudiarse y páracticarse fuera de todo un contexto de tipo místico o iniciatico, que, necesariamente, limitaba su audiencia. Si bien este hecho ha podado el árbol astrológico dde muchas de sus ramas, es innegable que gracias a él un número cada día creciente de personas, se interesa de un modo serio y sincero por la astrológia y accede a su conocimiento.