Quizás alguien se haya preguntado qué fue del niño que emergió milagrosamente de las aguas del pozo citado en la biografía de San Isidro; visto que ha habido muestras de agradecimiento - el mérito es de la red - y que la actividad del foro es limitadita, pues aquí os dejo un extracto de algo que he encontrado, y de paso damos luz a fotos que estaban olvidadas y que tienen su mensaje.
SAN ILLÁN LABRADOR.
La verdad es que se sabe muy poco de este Santo. En 1968, don Tomás Ibáñez,
párroco de la Villa de Cebolla (Toledo) informaba en una carta a don Gaspar de los Reyes y Mesa: “No hay papel ni escritura que hable de San Illán en la tierra”.
Las informaciones que se tienen son versiones que han ido pasando de padres a
hijos. Comentan que nació en Torrelaguna donde su padre –San Isidro- trabajaba como labrador y su madre –Santa María de la Cabeza- como sacristana o “santera” en una ermita donde se veneraba a NuestraSeñora de la Piedad. Al nacer, sus padres se trasladaron a Madrid, donde se produjoel famoso milagro del pozo.
Dicen también que cuando ya San Illán era mayor de edad sus padres decidieron separarse para vivir una vida más santa. La madre regresó a Torrelaguna donde comenzó a hacer milagros mientras cuidaba el fuego sagrado de la lámpara de la virgen. Mientras, San Isidro continuó en Madrid con su hijo.
Cuando murió su padre, Illán se desplazó a las aldeas de Villalba de Bolobras,
la Aldehuela y a Illán de Vacas donde sirvió al mismo patrón que su padre,
instalándose posteriormente de ermitaño en la ermita de Nuestra Señora de la
Antigua, vistiendo el hábito de San Antonio que era el que entonces usaban los cristianos.
Al morir le enterraron con ese hábito, un libro en la mano izquierda y en la
derecha un bieldo. Entres sus milagros hay que destacar curar el “mal de rabias”, el haber salvado a unos niños de morir ahogados en el río Tajo. O el de la aparición de Nuestra Señora a San Illán diciéndole donde debía pinchar en la tierra con su bastón para encontrar agua. De ahí nació la fuente que hoy se venera y de la que bebe todo aquel que pasa por la ermita.
Podemos ver una relación con el milagro realizado por su padre, en Madrid. A la ermita y a la fuente acudían los fieles desde la Mancha, Extremadura y Andalucía
con la esperanza de ser sanados.
La ermita de San Illán está situada a unos 3 km de Cebolla (Toledo) data del siglo XVI y consta de una sola nave de ladrillo, dentro se venera la imagen de la Virgen de la Antigua, patrona de Cebolla y los restos del Santo.
Cuenta la leyenda que fue un toro rabioso el que descubrió el sepulcro del Santo.
Su festividad se celebra el 16 de mayo. Se le tiene por santo abogado contra la rabia.
Un saludo torrenautas.
SAN ILLÁN LABRADOR.
La verdad es que se sabe muy poco de este Santo. En 1968, don Tomás Ibáñez,
párroco de la Villa de Cebolla (Toledo) informaba en una carta a don Gaspar de los Reyes y Mesa: “No hay papel ni escritura que hable de San Illán en la tierra”.
Las informaciones que se tienen son versiones que han ido pasando de padres a
hijos. Comentan que nació en Torrelaguna donde su padre –San Isidro- trabajaba como labrador y su madre –Santa María de la Cabeza- como sacristana o “santera” en una ermita donde se veneraba a NuestraSeñora de la Piedad. Al nacer, sus padres se trasladaron a Madrid, donde se produjoel famoso milagro del pozo.
Dicen también que cuando ya San Illán era mayor de edad sus padres decidieron separarse para vivir una vida más santa. La madre regresó a Torrelaguna donde comenzó a hacer milagros mientras cuidaba el fuego sagrado de la lámpara de la virgen. Mientras, San Isidro continuó en Madrid con su hijo.
Cuando murió su padre, Illán se desplazó a las aldeas de Villalba de Bolobras,
la Aldehuela y a Illán de Vacas donde sirvió al mismo patrón que su padre,
instalándose posteriormente de ermitaño en la ermita de Nuestra Señora de la
Antigua, vistiendo el hábito de San Antonio que era el que entonces usaban los cristianos.
Al morir le enterraron con ese hábito, un libro en la mano izquierda y en la
derecha un bieldo. Entres sus milagros hay que destacar curar el “mal de rabias”, el haber salvado a unos niños de morir ahogados en el río Tajo. O el de la aparición de Nuestra Señora a San Illán diciéndole donde debía pinchar en la tierra con su bastón para encontrar agua. De ahí nació la fuente que hoy se venera y de la que bebe todo aquel que pasa por la ermita.
Podemos ver una relación con el milagro realizado por su padre, en Madrid. A la ermita y a la fuente acudían los fieles desde la Mancha, Extremadura y Andalucía
con la esperanza de ser sanados.
La ermita de San Illán está situada a unos 3 km de Cebolla (Toledo) data del siglo XVI y consta de una sola nave de ladrillo, dentro se venera la imagen de la Virgen de la Antigua, patrona de Cebolla y los restos del Santo.
Cuenta la leyenda que fue un toro rabioso el que descubrió el sepulcro del Santo.
Su festividad se celebra el 16 de mayo. Se le tiene por santo abogado contra la rabia.
Un saludo torrenautas.