Hace unos días que fui por el valle del Jerte, y no me canso de ir por esas tierra maravillosdas una y otra vez, concretamente pasé por Jerte, situado en el curso alto del Valle de su mismo nombre. El atractivo paisajistico del lugar es innegable: el núcleo se circunda de huertos, prados cercanos y árboles frutales, mayormente cerezos, que pueblan los bancales de las abruptas laderas de la sierra de Tormantos y Candelario que ascienden a ambos lado de su caserio.
El pueblo se organiza urbanisticamente mediante dos largas calles _Coronel Golfin y la Carretera-, que evidencian un desarrollo longitudinal en torno al viejo camino que remonta el Valle. El desarrollo económico que trajo consigo el cultivo de la cereza desembocó una importante renovación del casco urbano, siendo pocos los ejemplos de arquitectura entramada que aún pueden admirarse entre sus callejas. En el Barrio de Bueyes existe alguna casa blasonada, con paramentos de cantería, que sobrevivió al incendio y saqueo perpetrado en 1809 por las tropas francesas dfel general Soult.
El pueblo se organiza urbanisticamente mediante dos largas calles _Coronel Golfin y la Carretera-, que evidencian un desarrollo longitudinal en torno al viejo camino que remonta el Valle. El desarrollo económico que trajo consigo el cultivo de la cereza desembocó una importante renovación del casco urbano, siendo pocos los ejemplos de arquitectura entramada que aún pueden admirarse entre sus callejas. En el Barrio de Bueyes existe alguna casa blasonada, con paramentos de cantería, que sobrevivió al incendio y saqueo perpetrado en 1809 por las tropas francesas dfel general Soult.