Seguimos en la localidad extremeña. Estamos cerca de la gran y espectacular
Plaza Mayor; sobre nuestras cabezas sobrevuela una blanca -con alas negras-,
cigüeña.
Como podemos comprobar, en su poderoso pico, lleva, bien sujetas, unas ramas de
árboles de la zona, que mezcladas con barro, construirán el correspondiente
nido.