Cada vez que paso por vuestro
pueblo con el
paisaje, tenéis a mi juicio uno de los
rincones más bonitos de la campiña sur de
Cáceres.
Pero sin duda el espectáculo es mayor cuando entro en el pueblo, me gusta la gente de
Valdemorales por su sencillez y espíritu de acogida.
El futuro de Valdemorales está en la capacidad para conservar su esencia, abajo el hormigón.
Uno de
Almoharín.