No hay
puesta de sol más bonita y
cielo mejor que el de mi
pueblo. El olor a pasto y tierra húmedos del
otoño, a jara de la
primavera... Los grillos y el croar de las ranas, las estrellas del
verano; la escarcha matutina que todo lo tiñe de blanco en
invierno; el café de puchero, las migas de mi abuela, la charanga de las
fiestas, los pregones, las
campanas...Si cierro los ojos puedo hacer una composición diversa a través de mis sentidos, miles de olores, sonidos, sabores...Infinitas sensaciones
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