UN CHISTE GRACIOSO Y SIN MALICIA
Un hombre entra en un
restaurante de última moda y sale a recibirle un robot, perfectamente vestido de maitre, que le dice:
'Lo siento, señor, pero todas las mesas están ocupadas y tendrá usted que esperar una media hora. Estoy perfectamente programado y, si usted lo desea, mientras la
casa le invita a una copa en la barra, podemos conversar un poco, para que la espera sea más agradable'
'De acuerdo', dice el cliente sorprendido.
' ¿Le importa decirme cual
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