De qué te quejas mujer
lo que ahora me reprochas
si llevamos tantas horas
viviendo con armonia,
y paredes has olvidado
en unas poquitas horas
lo mucho que me querias.
Déjame en paz te suplico
para calmsrme um poquito
del disgusto que me das,
pues por mucho que medito
no encuentro un rato maldito
para yo vivir en paz.
Acuérdate de tus hijos,
esos hijos que son nuestros,
y que en las noches de orgia
los dos estuvimos de acuerdo,
para traerlos al mundo,
ese mundo que es el nuestro.
La educación que le demos
a esos hijos deseados,
ha de servirnos de ejemplo
sin mirar para otro lado,
pensando tal vez mañana
sin que podamos dudarlo,
esos hijos que tenemos
de sus padres se acordaron.
jacintoP. SALUDOS
lo que ahora me reprochas
si llevamos tantas horas
viviendo con armonia,
y paredes has olvidado
en unas poquitas horas
lo mucho que me querias.
Déjame en paz te suplico
para calmsrme um poquito
del disgusto que me das,
pues por mucho que medito
no encuentro un rato maldito
para yo vivir en paz.
Acuérdate de tus hijos,
esos hijos que son nuestros,
y que en las noches de orgia
los dos estuvimos de acuerdo,
para traerlos al mundo,
ese mundo que es el nuestro.
La educación que le demos
a esos hijos deseados,
ha de servirnos de ejemplo
sin mirar para otro lado,
pensando tal vez mañana
sin que podamos dudarlo,
esos hijos que tenemos
de sus padres se acordaron.
jacintoP. SALUDOS