ARES: Madrugamos para acompañar a nuestro padre, tenía que...

Madrugamos para acompañar a nuestro padre, tenía que ser sábado pues en primavera era época lectiva y en casa no había excusa por no asistir a la escuela.
No recuerdo lo que se iba a sembrar, pero tengo presente aquellas chimeneas que desde el lugar en donde nos encontrábamos veíamos como soltaban humos a bocanadas por la leña que se quemaba debajo de los tres pies o en el mejor de los casos en una cocina de hierro, un ligero olor a cascarilla delataba lo que por ahí se cocinaba
Habían tocado diana, la vista que desde la distancia se apreciaba tenía una estampa bucólica difícil de igualar por un pintor acreditado.
La naturaleza en su versión original no es tan sencilla de expresar por un artista por las emociones que provoca en su estado original