A veces cuando tomamos la decisión de realizar una acto, no nos paramos a pensar que el impulso que nos induce obedece al acerbo cultural enraizado en donde se pierden los tiempos, tiene algo que ver con nuestros génes.
Viene esto al caso, por que nada más enterarme que íbamos a tener nuestro primer hijo, lo primero que me viene a la cabeza es que tengo que pintar el piso, iniciativa impensable en mí en una situación corriente, para mí la noticia era algo extraordinario cuando no deja de ser en la vida un suceso cotidiano.
Sentí que era algo instintivo salido de una fuerza interior por eso reincido en el principio de mi exposición.
Somos razón o fruto de una cultura incluso de aquella que dejó huella en nuestro código genético de un pasado que se pierde en los tiempos de los que carecemos información.
Y llegó el diminuto ser que no paraba de moverse lo cual inducía a pensar que su vida iba a ser cualquier cosa menos aburrida al tiempo que uno pensaba en el peso de responsabilidad que suponía hacerle compartir una sociedad de la cual no tenía claro que por lo cambiante que se nos presentaba era el escenario deseado para ofrecerselo al nuevo ser de cual uno era responsable de su llegada, una sensación supongo cómo la que puede tener aquel que sufre de pánico escénico, y luego a educar o a ser educado nunca lo sabré si así por el que por responsabilidad de uno vino a compartir esta sociedad de la que muchos de sus comportamientos que no compartimos por que consideramos mas que mejorables generan futuros tan inciertos de ahí el bajo índice de natalidad y ahí que comparte la idea de quien hablo y que por lo que parece comparte con quien ha decidido vivir, que sea por muchos años pero no seré yo quien de intentar hacer entrar en razón por que además no me harían puto caso, quien soy yo sino un mero espectador
Claro que un abuelo pasa de pánicos escénicos.
Pero al parecer mis ojos no lo verán
Buenos días
Viene esto al caso, por que nada más enterarme que íbamos a tener nuestro primer hijo, lo primero que me viene a la cabeza es que tengo que pintar el piso, iniciativa impensable en mí en una situación corriente, para mí la noticia era algo extraordinario cuando no deja de ser en la vida un suceso cotidiano.
Sentí que era algo instintivo salido de una fuerza interior por eso reincido en el principio de mi exposición.
Somos razón o fruto de una cultura incluso de aquella que dejó huella en nuestro código genético de un pasado que se pierde en los tiempos de los que carecemos información.
Y llegó el diminuto ser que no paraba de moverse lo cual inducía a pensar que su vida iba a ser cualquier cosa menos aburrida al tiempo que uno pensaba en el peso de responsabilidad que suponía hacerle compartir una sociedad de la cual no tenía claro que por lo cambiante que se nos presentaba era el escenario deseado para ofrecerselo al nuevo ser de cual uno era responsable de su llegada, una sensación supongo cómo la que puede tener aquel que sufre de pánico escénico, y luego a educar o a ser educado nunca lo sabré si así por el que por responsabilidad de uno vino a compartir esta sociedad de la que muchos de sus comportamientos que no compartimos por que consideramos mas que mejorables generan futuros tan inciertos de ahí el bajo índice de natalidad y ahí que comparte la idea de quien hablo y que por lo que parece comparte con quien ha decidido vivir, que sea por muchos años pero no seré yo quien de intentar hacer entrar en razón por que además no me harían puto caso, quien soy yo sino un mero espectador
Claro que un abuelo pasa de pánicos escénicos.
Pero al parecer mis ojos no lo verán
Buenos días