ARES: LA MOSCA COJONERA...

LA MOSCA COJONERA
Que para destruir a una generación de jóvenes no hace falta declarar una guerra, lo saben bien quienes   "santificaron" la movida y luego hablaron de ella como un referente de libertad y de creatividad o como rebeldía contra un pasado reciente cómo si colgarse de un pino fuera la solución a un pasado no resuelto
Y se ponen de perfil  ignorando lo que quedó bajo aquellas alfombras en las que se ocultan las consecuencias por sus altos índices de población carcelaria fruto de aquel desmadre colectivo; son   miles y miles de tumbas  a las que acuden  madres que con esperanza recibieron la llegada de sus criaturas a este mundo luego envenenadas por el delirio colectivo en el se se confundía libertad con el desmadre suicida cuyo signo residual son tantos zombis que deambulan por las ciudades a la que la gente mira con desprecio o cambia de acera para no encontrase con aquella triste realidad, ignorando que son los mismos que siendo niños se han dejado ir por la desinformación y por la ceguera  de quienes estaban obligados a convocar advirtiendo lo que se nos venía encima, precedentes habia de otros paises en donde ya estaban de vuelta.  Miseria de la que se enriqueció tanto hijo de puta y alguno confundido entre la honorabilidad de una riqueza a día de hoy injustificada.
Que poco se escribió sobre aquel fenómeno de complicidades y silencios interesados, molestaba menos una juventud narcotizada que otra sana y reivindicativa, y además para otros tantos aquella fiesta  era fuente de ingresos y no sólo para los que traficaban
Que poco o nada se ha escrito de aquella despreciable realidad, que poco de las complicidades por activa y por pasiva.; que mucho para aquellos que les sirve de inspiración y que al escribir betseller y no van al fondo de la cuestión  maquillando  a asesinos en héroes
Acaso queda rincón de pueblo o ciudad que no haya sufrido la consecuencia de aquel veneno.
Acaso no fue aquello un.... ""genocidio""
Pues a pesar de todo parece que sigue la fiesta y sus fatales consecuencias aunque en inferiores dimensiones
Pero ahí a la vuelta de la esquina parece que está pero sin tanta estridencia pero más tarde se verá y ya hablará aquel que esté para contarlo