ARES: No seré yo quien pretenda aguar la fiesta Indiana de...

No seré yo quien pretenda aguar la fiesta Indiana de Ares, es más, siento no poder asistir, pero no hay que olvidar que en Cuba hubo cimarrones de ojos azules y emigrantes  que no regresaron por que su patrimonio no dejó de ser una mano delante y otra mano detrás.
Por otra parte queda en la memoria popular, como en esta parte de Galicia tan afectada por la emigración y en particular a Cuba, y de precario patrimonio y justo recurso para sobrevivir se aguardaban noticias de algún familiar metido entre la bruma del olvido que compareciera a punto de morir con la buchaca llena y así agua de primavera
Y algúna que otra caricatura de personajes que hacían alarde de billeteras repletas entre gentes que no tenían un patacón que de todo hubo.
De lo positivo queda señal en la arquitectura y su contenido gracias los filántropos implicados, alguno que otro además negrero, no así en el caso de Ares
Festa rachada pués