Si hay un lugar que me fascina este es estacas una pequeña playa a la que para acceder hay que bajar unas escaleras casi en perpendicular construidas en el mismo espscio en el que discurria un camino angosto formado del subir y bajar durante muchos años sobre lo que podemos considerar un precipicio de tierra barrienta y betas de piedra sedimentaria y cuarzo, al encontrarte en la playa el limite en los dos sentidos lo forman una serie de rocas bajas que mueren en el mar que impiden aceder a calas vecinas cuando la marea esta llena no así en baja mar que te permite explorar cierto perimetro del litoral en donde entre rocas y arena se forman pequeñas piscinas en las que residen algas, pequeños peces y camarones y un deposito de agua que de forma caprichosa la naturaleza entre las rocas formó, al paisaje no le falta magnetismo y lo presiden dos rocas que como islotes que son emergen sobre el mar creando en el conjunto un sitio mágico que inspira a autodidactas y pintores de profesión
Su representación puede verse en murales y en fotografias ampliadas de alguna cafeteria
Falta la inspiración de algún poeta que dedique al lugar un merecido homenaje, referente e inolvidable para quienes tuvieron que abandonar el pueblo y lo disfrutaron
Su representación puede verse en murales y en fotografias ampliadas de alguna cafeteria
Falta la inspiración de algún poeta que dedique al lugar un merecido homenaje, referente e inolvidable para quienes tuvieron que abandonar el pueblo y lo disfrutaron