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"Menos mal que están en minoría, si no, esto sería una auténtica dictadura". Así de rotundo se mostró ayer el portavoz del grupo municipal del Partido Popular, Roberto García, a la hora de enjuiciar "las formas" del Gobierno local en la aprobación de las obras del Plan E.
Sus críticas coinciden con las expresadas por el BNG, que tildó también de "antidemocráticos" y "dictatoriales" los modos en que el Gobierno local aprobó las actuaciones a financiar con cargo a los tres millones del Fondo Estatal de Inversión Local (FEIL).
"Nos dieron un papel con las obras ya aprobadas a la salida de una comisión informativa de Deportes", lamentó la portavoz nacionalista, Silvia Seixas, que acusó a la alcaldesa de incumplir su compromiso de convocar una reunión para consensuar las obras con la oposición: "Su palabra es papel mojado", criticó.
Los grupos de la oposición centraron sus críticas en la "falta de diálogo" que precedió a la aprobación "unilateral" de las obras del FEIL, aunque ambos admitieron que la mayor parte de las actuaciones previstas por el bipartito son "necesarias".
El plan estrella del FEIL es la construcción de un centro multiusos en la escuela de Pastoriza, una obra a la que el Concello destina la tercera parte de los fondos. La instalación de una red de abastecimiento y alcantarillado en Larín y la mejora de la red informática de las dependencias municipales absorbe la mayor parte de la inversión restante.
A pesar de valorar las obras, BNG y PP lamentaron que el Gobierno local no incluyese ninguna de sus propuestas. La edil Silvia Seixas incidió en la necesidad de que las actuaciones contribuyan a mejorar la situación laboral de Arteixo -municipio con la mayor tasa de paro de la comarca-. Para conseguirlo, el BNG recordó su petición de peatonalizar varias calles del núcleo urbano para dinamizar el comercio local y la de construir un centro de día en la parcela que el Concello prevé destinar al circuito de seguridad vial.
Los populares lamentaron que el bipartito desoyese su propuesta de acometer un plan global de ahorro energético, una propuesta que el Concello ha decidido aplazar hasta disponer de los datos de una auditoría de consumo eléctrico que contratará en breve. Otra de sus propuestas constituye una antigua demanda de los vecinos de la zona norte del municipio, que reclaman desde hace años la construcción de una piscina municipal entre Meicende y Pastoriza.
Sus críticas coinciden con las expresadas por el BNG, que tildó también de "antidemocráticos" y "dictatoriales" los modos en que el Gobierno local aprobó las actuaciones a financiar con cargo a los tres millones del Fondo Estatal de Inversión Local (FEIL).
"Nos dieron un papel con las obras ya aprobadas a la salida de una comisión informativa de Deportes", lamentó la portavoz nacionalista, Silvia Seixas, que acusó a la alcaldesa de incumplir su compromiso de convocar una reunión para consensuar las obras con la oposición: "Su palabra es papel mojado", criticó.
Los grupos de la oposición centraron sus críticas en la "falta de diálogo" que precedió a la aprobación "unilateral" de las obras del FEIL, aunque ambos admitieron que la mayor parte de las actuaciones previstas por el bipartito son "necesarias".
El plan estrella del FEIL es la construcción de un centro multiusos en la escuela de Pastoriza, una obra a la que el Concello destina la tercera parte de los fondos. La instalación de una red de abastecimiento y alcantarillado en Larín y la mejora de la red informática de las dependencias municipales absorbe la mayor parte de la inversión restante.
A pesar de valorar las obras, BNG y PP lamentaron que el Gobierno local no incluyese ninguna de sus propuestas. La edil Silvia Seixas incidió en la necesidad de que las actuaciones contribuyan a mejorar la situación laboral de Arteixo -municipio con la mayor tasa de paro de la comarca-. Para conseguirlo, el BNG recordó su petición de peatonalizar varias calles del núcleo urbano para dinamizar el comercio local y la de construir un centro de día en la parcela que el Concello prevé destinar al circuito de seguridad vial.
Los populares lamentaron que el bipartito desoyese su propuesta de acometer un plan global de ahorro energético, una propuesta que el Concello ha decidido aplazar hasta disponer de los datos de una auditoría de consumo eléctrico que contratará en breve. Otra de sus propuestas constituye una antigua demanda de los vecinos de la zona norte del municipio, que reclaman desde hace años la construcción de una piscina municipal entre Meicende y Pastoriza.