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El Concello instalará un centro juvenil en la escuela de Barrañán

El Ayuntamiento destinó 280.000 euros a la reforma del inmueble, incluida en los presupuestos de 2007 a petición de los nacionalistas

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ANTARES PÉREZ | ARTEIXO El Concello de Arteixo creará el segundo centro juvenil del municipio en las instalaciones de la antigua escuela de Barrañán. Desde el Gobierno local que preside la socialista Pilar Souto han anunciado ya su intención de inaugurar "en breve" este local.

Según anticipó la responsable municipal de Xuventude, Lucía Ferreiro, el nuevo centro podría ser bautizado como la Casa de Silvia, en homenaje a la popular compositora arteixana Silvia Penide.

La ubicación del inmueble, aislado en una pequeña aldea de Barrañán, fue uno de los motivos esgrimidos por el bipartito para justificar su decisión de ceder estas instalaciones a los jóvenes.

La concejala de Xuventude apuntó que la antigua escuela de Barrañán es el lugar idóneo para la celebración de fiestas o ensayos sin causar molestias a los vecinos. Con su cesión, el Ayuntamiento pretende cumplir, además, un antiguo compromiso adquirido con las agrupaciones juveniles del municipio y paliar uno de los principales inconvenientes del único centro del que disponen actualmente los jóvenes, ubicado en la avenida del Balneario, en el bajo de un bloque de viviendas, lo que les obliga a cerrar sus puertas a partir de las diez de la noche.

La antigua escuela de Barrañán fue restaurada hace ya casi un año por el Concello y a petición del grupo municipal del BNG, que condicionó su apoyo a los presupuestos municipales del año 2007 a la inclusión de una partida destinada a la recuperación del edificio, construido en 1927.

A pesar de que las labores de acondicionamiento del inmueble, cuyo presupuesto ascendió a 280.000 euros, finalizaron el pasado mes de junio, las puertas del local han permanecido cerradas desde entonces, a la espera de que el Concello de Arteixo fijase un destino para las instalaciones.

Víctima del abandono

Durante años, el abandono hizo de la escuela el lugar idóneo para la celebración de fiestas clandestinas, según denunciaron en varias ocasiones los residentes en la parroquia de Barrañán.

Los vecinos de esta localidad arteixana recuerdan que eran frecuentes las hogueras en el interior del inmueble, y que tanto las ventanas y las puertas como el interior de la antigua escuela "estaban totalmente destrozados".

Con la cesión de la antigua escuela a las agrupaciones juveniles del municipio, finalizarán este tipo de actividades en el local, que pasará a convertirse en el segundo centro juvenil de la localidad.