LA PLAYA GRANDE DE MIÑO, TIENE PAISAJE.
Los verdes están brillando
sobre sus grandes cornisas,
la playa lo va notando
cuando la azotan las brisas.
La playa Grande de Miño
tiene curvas de vaivenes,
en su ambiente vi cariño
entre sus olas perennes.
Esta Ría de Betanzos
va respirando verdores,
donde se tejen los lazos
de mil distintos amores.
Laderas que van marcando
las conchas de sus almejas,
todo parece ir dejando
costumbres de cosas viejas..
La Playa tiene su encanto
entre largas caminatas,
el viento da desencanto
abrazando sus erratas.
Arena que da firmeza
a sus muchos caminantes,
en sus olas no hay torpeza,
solo signos elegantes.
Las algas llegan deprisa
para dejarnos sus señas,
hablan del viento y la brisa
cómo en las playas pequeñas.
La playa marca caminos
en las fechas veraniegas,
teniendo vibrantes signos
cuando las olas se pliegan.
Playa que sabe del frío
en las fechas invernales,
su brisa da escalofrío
de mil formas naturales.
G X Cantalapiedra…
Los verdes están brillando
sobre sus grandes cornisas,
la playa lo va notando
cuando la azotan las brisas.
La playa Grande de Miño
tiene curvas de vaivenes,
en su ambiente vi cariño
entre sus olas perennes.
Esta Ría de Betanzos
va respirando verdores,
donde se tejen los lazos
de mil distintos amores.
Laderas que van marcando
las conchas de sus almejas,
todo parece ir dejando
costumbres de cosas viejas..
La Playa tiene su encanto
entre largas caminatas,
el viento da desencanto
abrazando sus erratas.
Arena que da firmeza
a sus muchos caminantes,
en sus olas no hay torpeza,
solo signos elegantes.
Las algas llegan deprisa
para dejarnos sus señas,
hablan del viento y la brisa
cómo en las playas pequeñas.
La playa marca caminos
en las fechas veraniegas,
teniendo vibrantes signos
cuando las olas se pliegan.
Playa que sabe del frío
en las fechas invernales,
su brisa da escalofrío
de mil formas naturales.
G X Cantalapiedra…