ENTRE SOMBRAS DE ARBOLADOS
Eran tiempos de leyendas, entre sueños complicados,
fueron hombres que en sus sendas quisieron verse encantados.
En La Galicia Profunda entre brisas del verano,
alguna tristeza abunda sin dejar de ser humano.
Sombras llenas de templanza por caminos empedrados,
sin buscar jamás la danza de los cielos más nublados.
Los misterios dejan huellas sobre los campos regados,
dicen que se ven estrellas por los caminos soñados.
Las tradiciones abundan en estos preciosos campos,
donde las noches fecundan a veces los tristes llantos.
Sombras de viejas creencias, caminos de largos tramos,
ayer buscaron clemencias sin saber de los halagos.
Cuando las noches se alargan en misterios resaltados,
hay conciencias que se amargan por temer los resultados.
Galicia tiene sus sombras en caminos transitados,
y aunque no vuelen alondras dejan canticos marcados.
Sombras de viejos pesares, caminos medio ocultados,
hacen bellos los lugares entre verdes recordados.
Atrás dejamos misterios, con sus signos mal llevados,
mirando los cementerios sientes sus sitios sagrados.
Hay pasajes en Galicia que parecen delicados,
ninguno tiene noticia de ver los tiempos borrados.
Suenan los vientos con fuerza y tiemblan los arbolados,
el viento deja aspereza en los verdes bien cuidados.
Esta Galicia Profunda, la del cielo iluminado,
al ser la tierra fecunda deja al gallego amarrado.
Muy cerca tiene la costa, con sus rías y cercados,
la tarde se vuelve angosta sin ver los cielos nublados.
Las miradas son lamentos si ven los campos secados,
sintiendo los sufrimientos de momentos complicados.
G X Cantalapiedra.
Eran tiempos de leyendas, entre sueños complicados,
fueron hombres que en sus sendas quisieron verse encantados.
En La Galicia Profunda entre brisas del verano,
alguna tristeza abunda sin dejar de ser humano.
Sombras llenas de templanza por caminos empedrados,
sin buscar jamás la danza de los cielos más nublados.
Los misterios dejan huellas sobre los campos regados,
dicen que se ven estrellas por los caminos soñados.
Las tradiciones abundan en estos preciosos campos,
donde las noches fecundan a veces los tristes llantos.
Sombras de viejas creencias, caminos de largos tramos,
ayer buscaron clemencias sin saber de los halagos.
Cuando las noches se alargan en misterios resaltados,
hay conciencias que se amargan por temer los resultados.
Galicia tiene sus sombras en caminos transitados,
y aunque no vuelen alondras dejan canticos marcados.
Sombras de viejos pesares, caminos medio ocultados,
hacen bellos los lugares entre verdes recordados.
Atrás dejamos misterios, con sus signos mal llevados,
mirando los cementerios sientes sus sitios sagrados.
Hay pasajes en Galicia que parecen delicados,
ninguno tiene noticia de ver los tiempos borrados.
Suenan los vientos con fuerza y tiemblan los arbolados,
el viento deja aspereza en los verdes bien cuidados.
Esta Galicia Profunda, la del cielo iluminado,
al ser la tierra fecunda deja al gallego amarrado.
Muy cerca tiene la costa, con sus rías y cercados,
la tarde se vuelve angosta sin ver los cielos nublados.
Las miradas son lamentos si ven los campos secados,
sintiendo los sufrimientos de momentos complicados.
G X Cantalapiedra.