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MIRO AL MAR EMBRAVECIDO
Desde la costa mirando
ese mar tan tenebroso,
que a veces sientes bramando
mientras parece horroroso.
Las olas llegan deprisa
su fuerza la vas notando,
a veces corre la brisa
mientras te vas concentrando.
Miro al mar embravecido
que nos deja suplicando,
su ruido parece erguido
y van las olas saltando.
Desde la costa se entiende
ver sus ruidos destacando,
en la noche se comprende
el sonido machacando.
La noche nos deja ruidos
que parecen sobresaltos,
hay momentos deprimidos
donde puedes ver los llantos.
Tardes llenas de sorpresas
que quieren vivir tranquilas,
cuando las olas regresan
a las palmeras perfilas.
El mar nos deja mensajes
de sus horas deprimidas,
donde no valen anclajes
ni ver olas distinguidas.
El mar, la mar marinero
tu que vives navegando,
si te ves aventurero
no puedes seguir negando.
Estas olas desgarradas
con ecos de mar abierto,
son misiones olvidadas
que no tuvieron acierto.
G X Cantalapiedra.
Desde la costa mirando
ese mar tan tenebroso,
que a veces sientes bramando
mientras parece horroroso.
Las olas llegan deprisa
su fuerza la vas notando,
a veces corre la brisa
mientras te vas concentrando.
Miro al mar embravecido
que nos deja suplicando,
su ruido parece erguido
y van las olas saltando.
Desde la costa se entiende
ver sus ruidos destacando,
en la noche se comprende
el sonido machacando.
La noche nos deja ruidos
que parecen sobresaltos,
hay momentos deprimidos
donde puedes ver los llantos.
Tardes llenas de sorpresas
que quieren vivir tranquilas,
cuando las olas regresan
a las palmeras perfilas.
El mar nos deja mensajes
de sus horas deprimidas,
donde no valen anclajes
ni ver olas distinguidas.
El mar, la mar marinero
tu que vives navegando,
si te ves aventurero
no puedes seguir negando.
Estas olas desgarradas
con ecos de mar abierto,
son misiones olvidadas
que no tuvieron acierto.
G X Cantalapiedra.