¿QUE TENDRÁ PONTEDEUME?
Entre grandes eucaliptos
y laderas empinadas,
se pierden algunos gritos
en las noches muy cerradas.
Pisar sus calles estrechas
entre sombras marginadas,
sin querer notar las brechas
de marisqueras cansadas.
Montes que siguen centrados
hacia los campos de Miño,
con peregrinos cansados
que saben bien de cariño.
Piedras que siguen marcando
los caminos penitentes,
las hiedras siguen trazando
muchos preciosos ambientes.
Campo Santo entre viviendas
para vivir los misterios,
de los que toman las riendas
en sus momentos más serios.
En las viejas carreteras
las curvas siguen mandando,
donde no existen aceras
y el peligro va rondando.
Las noches dejan sus huellas
entre laderas brillando,
a veces ves las estrellas
mientras lo sigues pensando.
Galicia tiene paisajes
de mar montaña y caballos,
donde afloran sus anclajes
y se defienden los gallos.
Decir Galicia tiene delicia.
Y Puentedeume todo lo asume,
G X Cantalapiedra.
Entre grandes eucaliptos
y laderas empinadas,
se pierden algunos gritos
en las noches muy cerradas.
Pisar sus calles estrechas
entre sombras marginadas,
sin querer notar las brechas
de marisqueras cansadas.
Montes que siguen centrados
hacia los campos de Miño,
con peregrinos cansados
que saben bien de cariño.
Piedras que siguen marcando
los caminos penitentes,
las hiedras siguen trazando
muchos preciosos ambientes.
Campo Santo entre viviendas
para vivir los misterios,
de los que toman las riendas
en sus momentos más serios.
En las viejas carreteras
las curvas siguen mandando,
donde no existen aceras
y el peligro va rondando.
Las noches dejan sus huellas
entre laderas brillando,
a veces ves las estrellas
mientras lo sigues pensando.
Galicia tiene paisajes
de mar montaña y caballos,
donde afloran sus anclajes
y se defienden los gallos.
Decir Galicia tiene delicia.
Y Puentedeume todo lo asume,
G X Cantalapiedra.