PONTEDEUME: Y LLEGÓ A PUENTEDEUME...

Y LLEGÓ A PUENTEDEUME
Aquel viejo caminante por los caminos de España se presentó en Puentedeume sin ver su vereda extraña. Caminante de caminos sin poner nunca fronteras, Galicia tiene destinos que rozan las primaveras. Pisó calles en laderas, con sus cruces penitentes, sin temer jamás esperas llevo palabras de ambientes. Pisando calles preciosas, con leyendas de otros siglos, supo de vidas dichosas entre preciados sigilos. Viendo sus rías marchosas entre grandes arboledas, en sus horas más gozosas notó que el tiempo te enreda. Caminando por Galicia para sentir su paisaje, su vida fue la delicia sin echar jamás anclaje. No se qué tiene esa tierra de marisqueras famosas, que su misterio se encierra sobre sus rías preciosas. Y pisar por Puentedeume es notar como es Galicia, sobre su suelo se asume lo bueno de su delicia. El Puente cruzó pensando en conocer sus bondades, y el agua grito clamando “no sirven las vanidades”.. Puentedeume tiene un paseo que te llena de nostalgia, Es Rosalía de Castro que sus versos tienen magia. Gallegos con sus costumbres que flotan con buen ambiente, a veces buscas las lumbres que calientan a su gente. Puentedeume es historia que se lleva con dulzura, en esta costa de gloria no se piensa con locura. Manos que van trabajando para gozar de la vida, esta tierra va cantando al verse siempre elegida. Desde La Coruña a Ferrol el mar maneja su ritmo, y no fue jamás error ver esta tierra sin abismo. Marineros de las rías con sus olas peligrosas, en algunas noches frías existen rutas marchosas. G X Cantalapiedra.