QUISO SENTIRSE GALLEGO
Hay momentos en la vida que todo parece bueno, y gente que corre y gira mientras nos vende veneno. Vivimos con mucha prisa, no queremos usar freno, cuando la vista se eclipsa el momento nunca es bueno. Quiso sentirse gallego entre negras vibraciones, y pregonó sin un ruego que tenia sus razones. Para sentirse gallego debes nacer en Galicia, y comprender que tu ruego pudiera darnos delicia. Depende por donde llegues a la tierra de Galicia, y que tus nervios los pliegues para soltar tu primicia. Es difícil ser gallego si no conoces su tierra, no vale buscar un luego ni hablar de pasada guerra. Ser gallego no se compra ni puedes gritar al viento, el mar despide su sombra que a veces da sufrimiento. Nacer mamando sus costas que producen el misterio, pisando rutas angostas en algún momento serio. Es Galicia marinera borracha de sensaciones, con su gente aventurera repleta de conclusiones. Puedes vivir toda vida pisando tierra gallega, y buscar bella salida mientras el recuerdo pliega. Ser gallego con pasiones tiene mucho de codicia, se notan los corazones si saben lanzar primicia. Recordar a Rosalía en sus canticos gallegos, ella siempre lo sentía y lo escribía en sus pliegos. Pisar la tierra gallega con sus bonitas saudades, mientras la noche despliega muchas serias soledades. Vivir a pleno en Galicia tiene mucho de leyenda, hay quien habla de caricia y quiere tomar la rienda. La morriña sigue activa por los caminos del monte, su leyenda te cautiva y es de la vida un resorte. G X Cantalapiedra.
Hay momentos en la vida que todo parece bueno, y gente que corre y gira mientras nos vende veneno. Vivimos con mucha prisa, no queremos usar freno, cuando la vista se eclipsa el momento nunca es bueno. Quiso sentirse gallego entre negras vibraciones, y pregonó sin un ruego que tenia sus razones. Para sentirse gallego debes nacer en Galicia, y comprender que tu ruego pudiera darnos delicia. Depende por donde llegues a la tierra de Galicia, y que tus nervios los pliegues para soltar tu primicia. Es difícil ser gallego si no conoces su tierra, no vale buscar un luego ni hablar de pasada guerra. Ser gallego no se compra ni puedes gritar al viento, el mar despide su sombra que a veces da sufrimiento. Nacer mamando sus costas que producen el misterio, pisando rutas angostas en algún momento serio. Es Galicia marinera borracha de sensaciones, con su gente aventurera repleta de conclusiones. Puedes vivir toda vida pisando tierra gallega, y buscar bella salida mientras el recuerdo pliega. Ser gallego con pasiones tiene mucho de codicia, se notan los corazones si saben lanzar primicia. Recordar a Rosalía en sus canticos gallegos, ella siempre lo sentía y lo escribía en sus pliegos. Pisar la tierra gallega con sus bonitas saudades, mientras la noche despliega muchas serias soledades. Vivir a pleno en Galicia tiene mucho de leyenda, hay quien habla de caricia y quiere tomar la rienda. La morriña sigue activa por los caminos del monte, su leyenda te cautiva y es de la vida un resorte. G X Cantalapiedra.