LAS TARDES DE LLUVIA MELANCOLICA
Llueve sobre las verdes praderas,
llueve, mientras que van provocando,
melancolías tristes de esperas
que solas quieren marchar volando.
Llueve con penas inciertas
y están los campos secados,
hablan de praderas muertas
entre sueños desquiciados.
La morriña de Galicia
que sueña con arboledas,
su saudade no es delicia
si por los campos se enredan.
Llueve sobre algunas rías
en estas tardes de seda,
llegaran las noches frías
y el frío pondrá su veda.
Melancolía gallega
que va volando la rías,
cuando la lluvia nos riega
pueden llegar las porfías.
Llueve con aguas tranquilas
que bajan por las riberas,
muchas sombras se perfilan
con sus penas pasajeras.
Está lloviendo con rabia
por las costas de Galicia,
dice la persona sabia
que pudiera se caricia.
Llueve buscando las rías
un agua dulce y serena,
viendo las melancolías
que no quieren ver condena.
G X Cantalapiedra.
Llueve sobre las verdes praderas,
llueve, mientras que van provocando,
melancolías tristes de esperas
que solas quieren marchar volando.
Llueve con penas inciertas
y están los campos secados,
hablan de praderas muertas
entre sueños desquiciados.
La morriña de Galicia
que sueña con arboledas,
su saudade no es delicia
si por los campos se enredan.
Llueve sobre algunas rías
en estas tardes de seda,
llegaran las noches frías
y el frío pondrá su veda.
Melancolía gallega
que va volando la rías,
cuando la lluvia nos riega
pueden llegar las porfías.
Llueve con aguas tranquilas
que bajan por las riberas,
muchas sombras se perfilan
con sus penas pasajeras.
Está lloviendo con rabia
por las costas de Galicia,
dice la persona sabia
que pudiera se caricia.
Llueve buscando las rías
un agua dulce y serena,
viendo las melancolías
que no quieren ver condena.
G X Cantalapiedra.