galicia, durante quince días no pude ver el sol, tuve frío, vi llover muchas horas, y la niebla fue compañera de mi vida durante muchas horas, nadie era capaz de bañarse, y el clima de morriña y nostalgia inundaban hasta las chocolaterias, que sin dejar de tener visitas adecuadas. este clima que hace tan feliz a las personas que no quieren pasar calor es fabuloso. así y todo me encanta galicia con su saudade y su forma de estar en tan preciado clima. g x cantalapiedra.